jueves, 19 de noviembre de 2020

JOHN TOSHACK, CESADO

Se cumplen 30 años del cese del técnico galés del Real Madrid

Me llama la atención que la Revista Real Madrid, en su número correspondiente al mes de diciembre de 1990, le dedicara tan poco espacio a una noticia tan relevante. El 19 de noviembre de 1990, tal día como hoy de hace 30 años, el presidente Ramón Mendoza comparecía ante los medios de comunicación para anunciar la destitución de John Benjamin Toshack como entrenador del Real Madrid. Una pequeña pieza informativa resumía de forma bastante breve lo que había sido el final de la etapa del galés al frente del conjunto blanco. Ilustraba la noticia una fotografía de la rueda de prensa en la que se hizo pública la decisión de la Junta Directiva. Ante los micrófonos, el presidente Ramón Mendoza, el propio Toshack, y los vicepresidentes Lorenzo Sanz y Mariano Jaquotot.

No llegó al año y medio. 54 partidos oficiales dirigió en su primera etapa madridista el técnico que, prácticamente, fue contratado para tratar de ganar la Copa de Europa. En España el Real Madrid de la Quinta del Buitre arrasaba. También lo hizo con el propio Toshack, con quien el equipo logró una Liga, la 'quinta de la Quinta', con el famoso récord de los 107 goles. Pero las cosas se torcieron pronto en su segunda temporada y el míster protagonizó un cese a mitad de temporada que no se había producido en el Real Madrid desde que Amancio fue apartado del banquillo en la temporada 1984-85.

Técnico de carácter

John Benjamin Toshack fue cocinero antes que fraile. Nació en Cardiff, Gales, el 22 de marzo de 1949 y fue un futbolista de élite que inició su carrera profesional en las filas del Cardiff City, conjunto con el que ganaría 4 Copas de Gales. En la temporada 1970-71 dio el salto al Liverpool, donde se consagró como delantero centro y compartió protagonismo con Kevin Keegan. Allí ganó 2 Copas de Europa, 3 Ligas, 2 Copas de la UEFA, 1 Copa de Inglaterra y 1 Charity Shield. En 1978 pasó a ser entrenador jugador con el Swansea City, donde ejerció hasta 1983. Tras colgar las botas de forma definitiva y centrándose ya en sus labores como técnico llegó a Portugal para dirigir al Sporting de Lisboa en la temporada 1984-85. Un año después, en la temporada 1985-86, llegó al fútbol español para coger las riendas de una Real Sociedad en la que permanecería cuatro ejercicios consiguiendo éxitos más que notables como la Copa del Rey de 1987 frente al Atlético de Madrid o los subcampeonatos de Liga y Copa de la temporada 1987-88. Toshack fue ganando enteros posicionándose como uno de los entrenadores del momento.

A Leo Beenhakker le costó el puesto la Copa de Europa. El Real Madrid dominaba con claridad las competiciones domésticas pero la obsesión en el Club era la Copa de Europa que se resistía desde el año 1966. Con el técnico neerlandés el Madrid hizo un fútbol de lujo llegando a su cima futbolística en la temporada 1987-88. Pero la noche de Eindhoven dejó una herida profunda en la plantilla, en el cuerpo técnico y en el Club. Eran tan buenos que la inercia ganadora se mantuvo, pero lo cierto es que la Copa de Europa de la Quinta del Buitre se desvaneció frente al PSV. Las cosas ya no serían del todo igual... En la temporada 1988-89 el Real Madrid siguió gobernando en España pero en la Copa de Europa llegó alguna polémica para Beenhakker como el partido en el que dejó en el banquillo a Butragueño para jugar con Paco Llorente, lo que originó un tirón de orejas público por parte de Mendoza. Pero, sobre todo, lo peor fue la eliminación, de nuevo en semifinales, frente al Milán. La goleada 5-0 en Milán dejó al Real Madrid fuera de Europa y a Beenhakker fuera del Real Madrid. Acabó la temporada, pero ya se sabía que no seguiría. Los resultados eran magníficos. Leo se marchó ganando Liga, Copa del Rey y Supercopa de España y habiendo llegado a las semifinales de la Copa de Europa. Sí, el 5-0 fue un resultado durísimo, pero el Milán tenía un equipazo y era mejor en aquellos momentos. El Club, los aficionados, los periodistas... Todos se resistían en admitirlo, pero la gran oportunidad de ganar el máximo cetro continental había pasado ya... Sin embargo, había tal obsesión con la Copa de Europa que todos los éxitos recientes no bastaron. El Real Madrid quería un nuevo entrenador y el escogido fue John Benjamin Toshack.

En su ejemplar del mes de junio de 1989 la Revista Real Madrid ofreció un completo reportaje de 6 páginas en el que se presentaba a John Toshack como futuro entrenador del Real Madrid. La temporada todavía no había terminado. "John Benjamin Toshack será el nuevo entrenador del Real Madrid para las dos próximas temporadas, tras el acuerdo al que llegó con el presidente Ramón Mendoza. El galés se hará cargo del equipo el 1 de julio. No obstante, Toshack no quiere perder el tiempo y ya está trabajando en la planificación del futuro Real Madrid, que tendrá como objetivo principal la consecución de la Copa de Europa", señalaba la publicación oficial del Club. Más claro, agua. Sin rodeos. A Toshack se le fichaba para tratar de ganar la Copa de Europa. Era un reto, pero como explicaban en la revista, era un reto que le atraía. El galés tenía contrato con la Real Sociedad hasta 1991 pero había llegado a un pacto con los directivos donostiarras en caso de una oferta del Real Madrid. "Si otro club del mundo se hubiera interesado por mí yo estaría todavía en San Sebastián, así de claro. Creo que es un ejemplo de ambición profesional entrenar al Real Madrid", señalaba el míster.

La fama de hombre duro fue una de las etiquetas que le abrieron las puertas del Real Madrid. Muchos consideraban que a los componentes de la Quinta del Buitre les faltaba algo de carácter en Europa, sobre todo después de la marcha de los grandes veteranos que permanecían en el equipo a mediados de los ochenta. Los pinchazos en semifinales de la Copa de Europa, sobre todo el del Milán, despertaron una fuerte corriente de críticas sobre los Butragueño, Míchel, Martín Vázquez... Algunos pensaban que había que exigirles más. Y el que exige, en un equipo de fútbol, es el entrenador. Toshack, que se calificaba a sí mismo como un "cabrón simpático", rechazaba sin embargo aquella imagen de hombre duro. "No es cierto que sea serio, hay poca gente que tenga más alegría que yo. Y no soy nada duro, tengo un corazón mucho más blando de lo que la gente se pueda imaginar. De lo que sí soy plenamente consciente es de lo que representa el club al que vengo y de la responsabilidad que he adquirido", señalaba en el citado reportaje de la Revista Real Madrid. John Toshack era muy suyo, con aquel destrozado castellano y un acento muy cerrado que no terminó de evolucionar nunca. En las ruedas de prensa se hizo muy popular aquel famoso 'no comment' que tanto utilizaba... Y eso que no era muy dado a morderse la lengua y solía decir lo que pensaba. En ocasiones podía parecer incluso hasta agresivo con sus propios jugadores, originándose algunos roces como en aquella ocasión en la que dijo que él había sudado más en el banquillo que algunos de sus futbolistas en el campo y Paco Llorente contestó: "Si Toshack suda más que algunos jugadores es porque le da el sol en el banquillo y está gordo". Tremendo. Pues eso...

En lo estrictamente deportivo, la temporada 1989-90 se solventó con un nuevo paseo militar en la Liga. Toshack empezó haciendo algunas modificaciones que no terminaron de salir, como la de colocar a Chendo de líbero, pero pronto entendió que no era cuestión de ponerse a hacer muchos experimentos con un equipo que contaba con una columna vertebral muy definida y que funcionaba. Porque el equipo funcionaba, lo que ocurre es que la obsesión por la Copa de Europa hizo que la percepción que había en torno al Real Madrid fuese más negativa de lo que en realidad debía de ser. Y lo que son las cosas... Tantas vueltas con la Copa de Europa y resultó que aquella campaña la eliminación llegó mucho antes de lo esperado. Cosas del sorteo, todo hay que aclararlo. El primer rival de aquella edición 1989-90 fue el Spora Luxemburgo al que se doblegó con un global de 9-0 (0-3 en Luxemburgo y 6-0 en el Bernabéu) pero el segundo, en octavos de final, fue el Milán. El choque con el vigente Campeón llegaba muy pronto. El encuentro de ida, en Italia, se perdió 2-0 el 18 de octubre de 1989. En el encuentro de vuelta se ganó 1-0 con un tanto de Butragueño, pero no bastaba. Pesó mucho aquel segundo gol en Italia que había llegado de penalti injusto por señalar el árbitro el punto de castigo tras una falta de Buyo fuera del área. No había remedio. Se había plantado cara a un grandísimo rival que volvería a ganar la Copa de Europa ese año, pero el 1 de noviembre de 1989 el Real Madrid estaba fuera de Europa. Una pena puesto que de haberse jugado meses más tarde aquella especie de 'Final' adelantada quizás el desenlace pudo haber sido distinto. El Real Madrid de Toshack fue mejorando con el paso de las semanas y con un once muy definido fue cosechando goleada tras goleada. El 5 de abril de 1990 jugó la Final de Copa que se perdió con un Barcelona en superioridad numérica por la expulsión de Hierro en el descuento de la primera mitad. El equipo no se resintió y en Liga siguió con su paso firme hasta terminar llevándose el título de calle. Se superó por primera vez la barrera de los 100 goles dejando en 107 un récord del fútbol español que no se movería hasta la temporada 2011-12. El balance era muy bueno y las sensaciones eran buenas. Al menos de cara al aficionado. "Si no ganaba la Liga me echaban", declararía Toshack.

Temporada 1990-91 

El Real Madrid 1990-91 era diferente al de la temporada 1989-90. Se marcharon jugadores muy importantes, sobre todo Martín Vázquez y Schuster. Martín Vázquez había brillado con Toshack, con quien más adelante volvería a coincidir en el Deportivo, y firmó su mejor ejercicio como madridista. Su baja sería significativa, como la del alemán, uno de los mejores centrocampistas europeos. Agustín, Julio Llorente y Esteban también cambiaron de aires, al igual que Óscar Ruggeri. Con el argentino, que dejó el Bernabéu tras una sola campaña con nosotros, eran tres los titulares que dejaban el equipo. Para suplirlos regresaron los cedidos Santi Aragón y Juanjo Maqueda y se fichó a Luis Milla, Pedro Jaro, Villarroya, Pedrag Spasic y Gheorge Hagi. Pero ya desde la pretemporada había síntomas de que las cosas no iban a marchar como antes. Las nuevas piezas tenían que encajar y adaptarse, especialmente los extranjeros. Y Luis Milla, que venía para jugar de titular, se lesionó de gravedad el domingo 12 de agosto de 1990 en la Final del Trofeo Ciudad de la Línea. Rotura del ligamento cruzado anterior y del menisco interno de la rodilla izquierda. Más de medio año de recuperación por delante. A estos problemas se unieron roces como el que protagonizaron Mendoza y Toshack a raiz de las críticas que el técnico recibió por alinear en el Torneo Ciudad de Palma a jugadores que la organización consideraba que no eran titulares. El presidente madridista desautorizó a su propio técnico y se sumó a las críticas... A pesar de que el Real Madrid ganó el torneo. La actitud de Mendoza llevó a que la revista Don Balón le dedicara un editorial máximo mandatario blanco. "Mendoza ha vuelto a meter el remo hasta el fondo inmiscuyéndose en unas funciones, las del entrenador, en las que no debería tener competencia, y menos él, siempre tan atareado con asuntos que nada tienen que ver con el Real Madrid", escribía la dirección del semanario. El clima no parecía ser el más tranquilo posible, por lo que se entiende unas declaraciones de Toshack recogidas por la prensa: "Tengo ganas de que empiece la Liga para descansar". 

Pues sí. Después de una pretemporada algo desconcertante que acabó con la derrota frente al Milán (otra vez) en el Trofeo Santiago Bernabéu arrancó  la Liga 1990-91. Pero Toshack no pudo descansar mucho. Se empezó ganando 1-0 al Castellón, marcador que no dejó muy satisfechos ni a público, acostumbrado a los marcadares espectaculares de pocos meses atrás, ni a periodistas. Las críticas ya hicieron acto de presencia con aquel triunfo y se incrementaron con la primera derrota, que llegó en la segunda jornada, partido en Sevilla que finalizó 2-0. Los resultados mejoraron en las siguientes jornadas y el inicio de la Copa de Europa fue positivo al superar al Odense con un 1-4 en Dinamarca y un 6-0 en el Bernabéu. Sin embargo, en el mes de octubre la Liga se puso muy cuesta arriba con marcadores adversos. Tres empates consecutivos, 1-1 en Atotxa con la Real, 0-0 con el Logroñés en el Bernabéu y 0-0 con el Oviedo en el Carlos Tartiere, supusieron quedarse a cuatro puntos del líder, el Barcelona, en la tercera posición de la tabla. En la Copa de Europa cogimos aire con una goleada 9-1 frente al Tirol Innsbruck. Pero para cerrar octubre volvimos a tropezar en Liga. Una derrota dura, además, al caer 2-1 en el campo del recién ascendido Burgos. No habíamos llegado todavía a la décima jornada y el Real Madrid caía a la cuarta plaza. Ni que decir tiene que Toshack estaba en la cuerda floja. El Real Madrid llevaba años sin vivir una situación similar en Liga, donde había gobernado con mano de hierro los anteriores cinco años. En la jornada 10 se ganó al Español 2-1 con doblete de Butragueño. En la vuelta de la Copa de Europa con el Tirol se empató 2-2 para cerrar una eliminatoria más que resuelta ya en el Bernabéu. Fue el partido que sirvió para que Sebastián Losada lograra el gol 400 del Real Madrid en la máxima competición continental. La cosa terminó de descarrilar el sábado 17 de noviembre de 1990. El Real Madrid perdió 2-1 en el Luis Casanova con el ValenciaAl descanso el equipo perdía 2-0 y en el segundo periodo sólo se pudo recortar distancias con un penalti transformado por Hugo SánchezEl equipo era sexto en la tabla, a un paso de quedarse fuera de puestos UEFA. El balance en 11 jornadas de Liga era de sólo 5 victorias. 3 empates y 3 derrotas eran una losa importante llevando tan poco de competición.

Como suele suceder en el fútbol la cuerda se rompió por el lado de siempre, el del entrenador. El lunes 19 de noviembre de 1990 John Benjamin Toshack dejó de ser entrenador del Real Madrid. "La crisis ya cortó una cabeza", titulaba el diario Marca al día siguiente. "Toshack, cesado... Y el Madrid, desconcertado", añadía el rotativo madrileño, que en primera página realizaba un pequeño resumen de la situación que atravesaba el banquillo madridista. "Tras prolongar inútilmente la agonía del galés, el club no tiene sustituto".

"Lo que más siento es marcharme sabiendo que no he conseguido la Copa de Europa", destacaría el diario Marca en su portada del jueves 22 de noviembre. En primera página aparecía una fotografía del galés sosteniendo uno de las seis primeras copas continentales de la sala de trofeos del Santiago Bernabéu. "Gánala tú, Alfredo", titulaba el rotativo haciendo referencia a su sustituto en el banquillo madridista.

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