El 31 de agosto de 1996, tal día como hoy de hace 25 años, arrancaba oficialmente la Liga de la temporada 1996-97. Después de varios meses de enorme ilusión los aficionados madridistas habíamos visto incorporarse a futbolistas con los que el Real Madrid daría un enorme salto de calidad. Atrás quedaba ya la decepcionante temporada 1995-96 que tantos quebraderos de cabeza nos había dado. Al nuevo proyecto de Lorenzo Sanz se incorporaron futbolistas de la talla de Suker, Mijatovic, Seedorf o Roberto Carlos y un entrenador, Fabio Capello, que había llevado las riendas del equipo de moda de la época, el Milán, en sus éxitos más recientes. Las nuevas incorporaciones unidas a los grandes jugadores que ya había en la plantilla como Raúl, Hierro o Redondo, conformarían un bloque muy potente que prometía mucho. A la 'Liga de las Estrellas', como se la denominó aquella campaña, muchos de sus astros se los aportó el 'Madrid de las Estrellas'.
La competición oficial se inició aquel sábado, último día del mes de agosto, en Riazor. Plaza muy difícil, para empezar. Desde hacía unos años se nos atragantaba jugar allí con el Deportivo. Capello alineó de inicio un equipo curioso: Cañizares, Alkorta, Hierro, García Calvo, Roberto Carlos, Amavisca, Milla, Sanchís, Raúl, Mijatovic y Suker. Faltaba una semana para el debut de Bodo Illgner, que estaba a punto de llegar, por lo que Cañizares ocupó esa tarde la portería blanca. Los que sí que se estrenaron con la camiseta blanca en partido oficial esa tarde fueron Roberto Carlos, Mijatovic y Suker. A destacar la presencia de Manolo Sanchís en el centro del campo, como en sus inicios en el equipo blanco. Capello confiaría ese año en un eje de la zaga formado por Hierro y Alkorta, titulares indiscutibles, lo que le hizo recurrir a Sanchís en contadas ocasiones y para actuar en el medio. También significativo fue el trío atacante: Raúl, Mijatovic y Suker serían los principales protagonistas del ataque blanco durante toda la campaña actuando Raúl por la izquierda como centrocampista aunque incorporándose como un delantero más. Espectacular la campaña del 7, por cierto, que con sólo 19 años ya era un líder del equipo.
El partido terminó con un empate 1-1 que quizás no era para tirar cohetes, dado el optimismo que había generado la plantilla ese verano, con presentación multitudinaria incluida, pero no era un mal resultado. Se sumaba un punto a domicilio y en casa de un rival que nos generaba muchos problemas y que llevaba varias campañas instalado entre los grandes del fútbol español. Además, como acabamos de ver, la alineación de aquella tarde estaba formada por un equipo, digamos, de circunstancias. Faltaban muchos nombres de los que luego serían habituales en el equipo a lo largo de ese inolvidable año y los futbolistas todavía estaban acoplándose unos con otros. Se adelantaron los anfitriones con un tanto de Martins en el minuto 22. El colegiado, Daudén Ibáñez, expulsó a Luis Milla en los primeros compases del segundo tiempo y al local Armando en el 74', lo que deslució un poco el espectáculo. En el descuento también Donato enfilaría los vestuarios antes de tiempo. Antes, en el minuto 78, una incorporación de Roberto Carlos concluyó con disparo del brasileño y el balón entrando a gol con la colaboración involuntaria de Naybet. Había calidad en el equipo, pero en ese primer partido oficial de la temporada 1996-97 el Real Madrid tiró de garra y pundonor para volverse a la capital con su primer punto en el bolsillo. No fue un partido memorable, ni muchísimo menos. Pero fue el pistoletazo de salida para un Madrid que terminaría dejando un gran recuerdo entre los aficionados y que iniciaría una nueva etapa en la Historia del Club ganando una Liga muy especial.
DEPORTIVO: Songo'o, Armando, Bonissel, Naybet, Paco, Donato, Djukic, Rivaldo, Fran (Alfredo, 80'), Martins y Madar (Viqueira, 86').
REAL MADRID: Cañizares, Alkorta, Hierro, García Calvo, Roberto Carlos, Amavisca, Milla, Sanchís, Raúl, Mijatovic y Suker (Víctor, 89').
GOLES
1-0 min. 22 Martins
1-1 min. 78 Roberto Carlos
