El famosísimo cantante jugó en las categorías inferiores del Club antes de dedicarse a la músicaMientras realizaba la anterior entrada dedicada a nuestro canterano Álvaro Benito, actual líder del grupo de música Pignoise, no pude evitar acordarme de otra celebridad del mundo de la música. Un cantante que, al igual que Álvaro, golpeó el balón antes de terminar en la disciplina artística y que además también jugó en el Real Madrid. Me refiero a Julio Iglesias.
Julio Iglesias, el cantante español de más éxito y celebridad mundial, jugó en las categorías inferiores del Real Madrid. Los paralelismos con el caso de Álvaro Benito son evidentes. En ambos casos el infortunio truncó sus prometedoras carreras deportivas. Una lesión en el caso de Álvaro y un grave accidente en el caso de Julio. Y en ambos casos también los periodos de convalecencia y recuperación fueron claves a la hora de terminar aterrizando en el mundo de la música.
Julio José Iglesias de la Cueva nació en Madrid el 23 de septiembre de 1943. Defendió la camiseta del Real Madrid en sus categorías inferiores como portero. Sin embargo, los sueños de llegar a convertirse en una estrella de fútbol se desvanecieron el 22 de septiembre de 1962. Ese día, Julio Iglesias sufrió un terrible accidente de circulación que a punto estuvo de dejarle paralítico.
Los primeros partes médicos daban por hecho que, con toda seguridad, Julio Iglesias no podría volver a caminar. Durante más de año y medio tuvo que afrontar una durísima rehabilitación para poder volverse a poner en pie. Horas y horas de ejercicios y tratamientos que había que afrontar con entereza y muchísima paciencia. Durante ese periodo, una guitarra le ayudó a combatir el aburrimiento y las horas muertas. ¿Todo esto os suena, verdad? El resto es historia. Las primeras notas y canciones fueron el germen de una pasión por la música que acabó derivando en una carrera artística absolutamente legendaria.
Recuerdos de blanco
En la obra Historia viva del Real Madrid, publicada por el diario ABC en el año 1987, se incluye un reportaje dedicado al cantante en el que el propio artista recuerda su paso por la entidad merengue. Julio Iglesias: Del Bernabéu al infinito, se titula el reportaje que incluye además una cita del protagonista: "El Real Madrid es para mí como mi casa".
A lo largo de cuatro páginas, Julio Iglesias recuerda cómo vivió su etapa de jugador en el Madrid. "En estos momentos me resulta difícil volver la mente al pasado y recordar toda aquella etapa de mi vida. Para mí fue estupenda; era joven, tenía toda la vida por delante y unas enormes ganas de vivir, que aún conservo, pero en otra medida. El mejor de mis recuerdos son mis amigos: Pirri, De Felipe, Amancio... Yo estaba en los juveniles, pero los grandes del primer equipo siempre se ocupaban de nosotros, nos echaban una manita y nos animaban a seguir luchando", rememoraba Julio Iglesias, que no vacilaba a la hora de expresar su sentimiento por el Club. "El Real Madrid es como un segundo hogar para mí".
En aquel reportaje, el artista explicaba también cómo fueron sus primeros pasos en el fútbol y cómo acabó en la demarcación de portero. "En mis comienzos me sentía fuerte y dispuesto a jugar en todos y cada uno de los puestos que me dijeran. Tenía cualidades, al menos eso decían los entrenadores que tenía. Me aconsejaron que me limitara a actuar en el puesto de guardameta porque en él destacaría. Era, tal y como me dijeron, un cancerbero nato, por lo que me dediqué de lleno a ello. A medida que entrenaba me di cuenta de que en ese puesto me sentía cómodo y puse todo el empeño en ello. Ser portero no es tan sencillo como la gente piensa. Necesitas concentración y seguir el juego segundo a segundo durante los noventa minutos", explicaba Julio Iglesias.
En el reportaje se habla, cómo no, del accidente que acabó con su trayectoria deportiva. "Aquello fue una experiencia que nunca olvidaré. Me costó mucho tiempo superarlo, aunque finalmente lo conseguí. A pesar de ello, aun después del paso del tiempo, todavía tengo aquellas secuencias tan claras como si hubieran ocurrido hace horas. Debo decir, no obstante, que ahora no me quitan el sueño porque el trabajo, mi profesión, mis hijos, los amigos y subir cada día un poquito más llena mi vida", aseguraba el artista.
Le preguntaban también si no soñaba en algún momento que podría haber sido el guardameta que el Real Madrid ha tenido en Miguel Ángel o García Remón. "Alguna vez he soñado con que era yo el portero del Real Madrid, pero viendo las hazañas de Miguel Ángel o García Remón, o del resto de los guardametas de la Liga española, creo que nunca hubiese llegado a ser tan bueno. Pero, bueno, soñar no cuesta nada", admitía Julio Iglesias.
En aquel reportaje, el reputado artista explicaba lo que significaba el Real Madrid para él. "El Real Madrid es para mí como mi casa. Cuando tengo la oportunidad de pasar por el estadio Santiago Bernabéu recuerdo, sueño y pienso en lo que habría podido ser y no fue. Siento añoranza, pero intento compensarlo siguiendo las hazañas futbolísticas del Real Madrid a pesar del tiempo y la distancia. En la 'casa blanca' conservo muy buenos amigos y pienso que eso no se puede valorar", afirmaba el célebre cantante.
El reportaje de ABC, pese a estar publicado en el año 1987, estaba ilustrado con unas cuantas fotografías de la vida personal del protagonista. También había varias imágenes de Julio Iglesias ataviado con una camiseta del Real Madrid y posando bajo los palos de una de las porterías del Santiago Bernabéu. Esas instantáneas fueron tomadas durante la promoción del concierto que el artista ofreció en el Bernabéu el lunes 12 de septiembre de 1983. De hecho, entre las fotografías hay una en la que se ve a Julio Iglesias acompañado sobre el césped del Bernabéu por el entonces presidente madridista Don Luis de Carlos.
Como en el caso de Álvaro Benito, nunca se sabrá hasta dónde hubiese podido llegar la carrera futbolística de Julio Iglesias en el caso de no haber sufrido aquel accidente que cambió el rumbo de su vida a los 19 años. Por edad, quizás hubiese llegado a ser Campeón de Europa en el año 1966 con sus compañeros de quinta Manolo Velázquez, Ramón Grosso y el resto de componentes de aquel Madrid 'Ye-ye'.
En cualquier caso, no le fue nada mal en la vida, ¿verdad? Cambió los guantes de portero por el micrófono y la guitarra para convertirse en una leyenda mundial de la música. Millones de discos vendidos por todo el mundo le han consagrado como el cantante español de más éxito internacional.
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