Recordando a la Quinta del Buitre, en el cuarenta aniversario de su llegada al primer equipo del Real Madrid, es indispensable darle el mérito que se merece a los entrenadores que formaron a estos jugadores en los diferentes escalafones de la cantera del Club. Todos los técnicos que les tuvieron en las categorías inferiores trabajaron para formar a unos futbolistas que dieron muchos éxitos a la entidad. El último paso fue el del Castilla. Y allí, en el banquillo del segundo equipo, se encontraba toda una Leyenda: Amancio Amaro. El gallego, como apuntaba hace unos días, posaba con sus discípulos en la fotografía de Raúl Cancio que ilustraba el artículo de Julio César Iglesias en El País. Amancio, que desgraciadamente nos ha dejado este mismo año 2023, fue muy importante en el despegue definitivo de las carreras deportivas de los integrantes de la Quinta. Tan es así que todos ellos, en grupo, se acercaron a despedirse de él en las horas previas a su fallecimiento. Míchel, que se encontraba entrenando en Grecia, contactó con todos ellos desde la distancia en esa emotiva reunión. Además, tras hacerse pública la noticia del triste desenlace, publicó un emotivo mensaje en sus redes sociales: "Te quiero mucho. Te debo todo. Sólo otra persona ha creído tanto en mí como tú: Mi padre. Por eso os lloraré siempre. Gracias infinitas y eternas".
Amancio Amaro Varela ha dejado un gran vacío. A veces pienso que su figura no ha estado lo suficientemente valorada, eclipsada quizás por otros nombres más recientes en la enorme lista de legendarios jugadores que han pasado por el Santiago Bernabéu. Pero Amancio ha sido uno de los más grandes. Lo dirán, con razón, todos los que le vieron jugar y todos los niños de los sesenta y de los setenta que le tuvieron como ídolo. Amancio, además, lo ha sido todo. Enorme jugador, técnico de la cantera, entrenador del primer equipo e incluso Presidente de Honor, cargo que ostentó en los últimos meses de su vida. Leyenda absoluta del Real Madrid.
Recordando a Amancio
Amancio Amaro Varela nació en A Coruña el 16 de octubre de 1939. Se inició en el mundo del fútbol con equipos de su tierra antes de conseguir dar el salto al Deportivo de La Coruña, equipo con el que debutó en Segunda División en septiembre de 1958. Militó en el cuadro gallego hasta la temporada 1961-62, siempre en la categoría de plata, ganando la Liga en la última de ellas y siendo Pichichi con 25 goles. El verano de 1962 fue fichado por el Real Madrid como una de las apuestas del presidente Santiago Bernabéu para iniciar la renovación de un equipo en el que empezaban a causar baja algunos de los grandes veteranos de la gloriosa época dorada de las Copas de Europa. Se estaba gestando el Madrid 'yeyé' y Amancio sería una de sus principales figuras. Debutó de blanco el 5 de septiembre de 1962 frente al Anderlecht, en competición europea. Se estrenó en Primera División en Sevilla, en un Betis-Real Madrid disputado el 16 de septiembre de 1962. Ganaron los de Miguel Muñoz 2-5 y una de las dianas llevó la firma de Amancio. Fue el primero de muchos tantos para aquel joven que todavía no había cumplido los 23 años pero que estaba llamado a ser uno de los grandes del fútbol español. 'El Brujo', como se le conoció, fue un delantero extraordinario que, con el número 7 a la espalda, dejó para el recuerdo todo tipo de regates, quiebros y goles. Internacional en 42 ocasiones con la Selección, fue uno de los integrantes del equipo Campeón de la Eurocopa de 1964. En 1966 conquistó junto a sus compañeros La Sexta Copa de Europa para el Club blanco, siendo además el autor del 1-1 en la Final disputada en Heysel, Bruselas, frente al Partizan de Belgrado. Durante su prolífica carrera como jugador blanco llegó a recibir el Balón de Bronce en 1964 y fue convocado, en 1968, para formar parte de la Selección Mundial de la FIFA.
Amancio Amaro disputó un total de 472 partidos oficiales y anotó 155 goles con el Real Madrid entre las temporadas 1962-63 y 1975-76. Su palmarés final como jugador blanco quedó formado por 1 Copa de Europa, 9 Ligas y 3 Copas de España. Fue Pichichi de la Liga española en dos ocasiones, 1968-69 y 1969-70.
Tras retirarse pasó a entrenar en las categorías inferiores del Club y en la temporada 1982-83 se sentó en el banquillo del Castilla, donde dirigió a los componentes de la Quinta del Buitre. "Los chavales son fenomenales y tienen mucha humildad", declaraba en una entrevista publicada por el Boletín oficial del Club en la que dejaba patente su satisfacción en aquellos momentos. "Estoy tan a gusto que no me importaría acabar mi vida deportiva en el Castilla", añadía. Amancio pasó dos años en el filial y en la temporada 1983-84 lo hizo Campeón de Liga de Segunda División, hecho que no se ha vuelto a repetir desde entonces. Ese éxito le abrió las puertas del primer equipo y en la campaña 1984-85 sucedió a Alfredo Di Stéfano como entrenador del Real Madrid. Él fue el encargado de subir a Míchel, el último integrante de la Quinta del Buitre en asentarse como jugador blanco. Desafortunadamente, Amancio no consiguió terminar aquel ejercicio completo y en abril de 1985 fue sustituido por Luis Molowny. No obstante, es justo reconocer su cuota de mérito en los títulos que se adjudicó el conjunto blanco en la recta final de la campaña, la Copa de la UEFA y la Copa de la Liga. No volvió a entrenar en la élite.
Amancio volvería al Real Madrid en julio de 2000, al ganar las elecciones Florentino Pérez, desempeñando diversas labores directivas. Entre otras cosas fue presidente de la Comisión Organizadora del Centenario del Club en 2002. Fue habitual verle ejercer como embajador del Club en numerosos actos institucionales y fue también presidente de la Asociación de Veteranos. Sus últimos meses de vida los pasó ejerciendo como Presidente de Honor tras ser proclamado el 2 de octubre de 2022. Desgraciadamente nos dejó el pasado 21 de febrero de 2023 a los 83 años de edad. Sirvan estas pocas líneas en 'Historias del Real Madrid' como mi particular homenaje, a modo de recuerdo, para esta gran Leyenda del Club. Descanse en paz, Don Amancio Amaro Varela.
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