RECORDANDO A JUANITO

Biografía del inolvidable 7 malagueño con la información de las últimas entradas de 'Historias del Real Madrid' correspondientes al 25 aniversario de su fallecimiento

Toca ir cerrando el serial de entradas especiales dedicadas de manera monográfica a Juan Gómez 'Juanito' con motivo del 25 aniversario de su desaparición. Hoy voy a recoger los textos de varias de esas entradas publicadas aquí en 'Historias del Real Madrid' para realizar una completa biografía del malogrado astro malagueño.

Recordando a Juanito

Juan Gómez 'Juanito', inició su larga y fructífera carrera como jugador del Real Madrid en el año 1977. Este verano se cumplirán cuarenta años de sus primeras apariciones como jugador blanco. Sin embargo, el fichaje del futbolista de Fuengirola se gestó varios meses antes, a finales de noviembre de 1976.

Sin duda se trataba de uno de los nombres propios del fútbol español en aquellos momentos. En 1976 ya no se trataba de una promesa. Era toda una realidad. Tras salir del Atlético de Madrid en 1973, con sólo 18 años recala en el Burgos para jugar en Segunda División. Allí se convierte en uno de los destacados del equipo pese a su juventud con su endiablado juego, su velocidad y sus goles.

En su tercera campaña y con el ex madridista Lucien Muller como entrenador el Burgos es Campeón de Segunda División de la temporada 1975-76 y logra el ascenso a Primera División. Juanito llegaba a la élite para quedarse. El de Fuengirola, que ya había llamado la atención de los técnicos del Real Madrid, despertó el interés de su antiguo club, el Atlético de Madrid, e incluso el Barcelona inició contactos con el Burgos para fichar al jugador. Afortunadamente, sin embargo, fue el Real Madrid el que se llevó el gato al agua... El viernes 19 de noviembre, en concreto, se cerró el acuerdo del traspaso entre el Burgos y el Real Madrid.

El Real Madrid no atravesaba un buen momento cuando se hizo con los servicios del extremo malagueño. Al equipo no le estaban saliendo bien las cosas en aquel ejercicio 1976-77. Los de Miljan Miljanić se fueron descolgando de la Liga según iban pasando las jornadas. En Copa de Europa, el Madrid cayó en segunda ronda, octavos de final, eliminado por el Brujas de Bélgica. Y en la Copa el conjunto blanco quedó apeado por el Hércules en la primera ronda que disputaba. Aquella temporada el Madrid terminó en novena posición y por primera vez quedaba fuera de las competiciones europeas.

Juan Gómez 'Juanito' sería uno de los futbolistas llamados a elevar la categoría competitiva del Real Madrid para la siguiente temporada 1977-78.

Fichaje blanco

El boletín oficial del Real Madrid en su número 319, correspondiente al mes de diciembre de 1976, ya recogía la información de la llegada del nuevo jugador. 'Juanito vestirá de blanco', titulaba la publicación oficial en la página 9. "Se ha llegado a un acuerdo para la temporada 1977-78", puntualizaba el boletín.

"Asunto solucionado: Juanito -uno de los nombres más traídos y llevados en los últimos meses- vestirá de blanco la próxima temporada. El Burgos, el jugador y el Real Madrid han llegado a un perfecto acuerdo y de no suceder nada anormal, lo que también está previsto en las negociaciones, el joven internacional se incorporará a la plantilla del Real Madrid al inicio de la temporada 1977-78", explicaban en el boletín.

La revista oficial ofrecía, a página completa, un repaso de todos los pormenores de la operación y detallaba cómo se había gestado una operación que se remontaba varios meses atrás, tal y como podemos leer a continuación.

"El Real Madrid observaba a Juanito desde la pasada temporada y estaba interesado en su fichaje. No hay que dudar que se trataba de una de las grandes promesas del fútbol español en aquel entonces y hoy ya realidad casi plena, confirmada por el logro de los entorchados internacionales.

En el pasado mes de julio se mantuvo una entrevista con el presidente del Burgos, señor Martínez Laredo, que pidió jugadores y no dinero a cambio de Juanito. Pero los jugadores solicitados por el Burgos entraban en el sistema de Miljanic y no se llegó a un acuerdo, quedando las negociaciones interrumpidas, con la promesa de Martínez Laredo de que en caso de traspasar a Juanito contaría con el Madrid.

Posteriormente se supo por la prensa que el Barcelona se había interesado también por Juanito. Por ética y delicadeza el Real Madrid se abstuvo de hacer ningún tipo de presión sobre el presidente burgalés, pese a tener su palabra empeñada. Días después, y como tampoco ignoran nuestros lectores, las negociaciones con el Barcelona quedaron rotas y fue entonces cuando el señor Martínez Laredo se puso al habla telefónicamente con el Real Madrid para preguntar si el jugador seguía interesando. El Madrid consultó a sus técnicos, éstos dieron el visto bueno... y las negociaciones con el Burgos se reanudaron inmediatamente con la condición de que el jugador fuese consultado. Juanito, que había manifestado su madridismo en muchas ocasiones y su deseo de jugar en el Madrid se llevó una gran alegría al conocer el nuevo rumbo que tomaba su traspaso y no puso ningún inconveniente, afirmando incluso que no le importaría firmar en blanco, por lo que él llama "el club de sus amores".

Y así es como se ha solucionado el asunto. Juanito no podía venir ahora al Madrid, pues no podría alinearse ni siquiera en la Copa. Todo había que supeditarlo, pues, a la próxima temporada. Y para 1977-78 se han atado los cabos de este fichaje que, sin duda, alegrará a los seguidores madridistas tanto como al propio Juanito, triunfador actualmente en el Burgos y en la selección nacional", explicaba el boletín oficial.

Juanito completó aquella temporada 1976-77 con el Burgos, equipo con el que cumplía su cuarta campaña. Aquella última jugando en Primera División. Un mes antes de su fichaje por el Club blanco, Juanito ya había jugado en el Santiago Bernabéu con la camiseta del Burgos. Fue en un Real Madrid-Burgos correspondiente a la sexta jornada del Campeonato Nacional de Liga que concluyó con triunfo madridista por 1-0.

En la segunda vuelta, Juanito volvió a jugar contra el que sería su nuevo equipo. Fue el domingo 20 de febrero de 1977 en El Plantio. Ganó el Burgos 3-2 y Juanito marcó dos goles ante los que, meses después, serían sus nuevos compañeros. "El primer gol burgalés se contabilizó a los 35 minutos, en jugada personal de Juanito, que logró batir a Miguel Ángel tras engañar con varios quiebros a los defensores", relataba el boletín oficial del Real Madrid correspondiente a marzo de 1977 en su crónica del partido. "Tras el descanso, a los 56 minutos, empató el Madrid por mediación de Jensen, que envió un tiro cruzado sobre el portal de Manzanedo. A los 62 minutos se adelantaba nuevamente el Burgos con otro gol de Juanito en un balón que sorprendió a Miguel Ángel, pues parecía que Juanito intentaba centrarlo y lo envió directamente a puerta sobre la posición del meta", recogía la crónica del boletín. Posteriormente empataría Santillana con el 2-2 y Sergio Kresic anotaría el gol del triunfo para los locales. "Digamos que Juanito justificó -dos goles y un gran partido de principio a fin- su fichaje por el Madrid", apostillaba el boletín oficial del Club blanco en su número 322.

Juanito jugó 32 partidos de Liga con el Burgos aquella temporada 1976-77. Fueron sus primeros 32 partidos en Primera División. Marcó nueve goles. Aquella misma campaña había debutado con la Selección en un España-Yugoslavia disputado el 10 de octubre de 1976. El 27 de marzo de 1977, frente a Hungría, anotó su primer gol como la camiseta del combinado nacional. Al concluir la temporada 1976-77 el de Fuengirola ya había jugado tres partidos como Internacional. Tenía 22 años. Y el siguiente paso era el Real Madrid.

Nuevo futbolista blanco

Una vez finalizada la temporada 1976-77, Juanito pudo ya, por fin, vestir la camiseta del cuadro merengue. "Juanito, incorporado al equipo", titulaba el boletín oficial del Real Madrid en su número de junio de 1977. La portada tenía como protagonista al malagueño, fotografiado en el césped del Santiago Bernabéu durante su presentación a los medios gráficos. "Terminada la competición de Liga, Juanito se ha incorporado al equipo del Real Madrid, tal y como estaba previsto desde que se concertase su traspaso con el Burgos. Es el primer refuerzo de cara a la próxima temporada", informaba la portada del número 325 del boletín madridista, que incluía, además, un póster del futbolista.

"Ya está Juanito en el Real Madrid", titulaban en páginas interiores. La publicación oficial incluía un reportaje a todo color con imágenes del nuevo futbolista blanco y ofrecían una pequeña entrevista en la que Juanito se mostraba totalmente satisfecho con la nueva etapa deportiva que iniciaba. "Con este fichaje he cumplido la mayor ambición de mi vida profesional", aseguraba el futbolista. Le apuntaban al jugador que la afición esperaba que el equipo mejorase con su concurso. "Hombre, y yo también. Todos esperamos que el Madrid sea la próxima temporada un equipo que luche por todos los títulos, y que gane alguno", apuntaba Juanito. Le preguntaban también si se amoldaría al juego madridista. "Estoy seguro de ello. Mi juego no tiene secretos", respondía el jugador. "Con los jugadores que tiene mi nuevo equipo espero rendir todavía más que en el Burgos. Traigo una ilusión loca", añadía el de Fuengirola radiante de felicidad.

El lunes 11 de julio de 1977 se presentó la plantilla del Real Madrid para la temporada 1977-78. Entre las novedades estaban los canteranos Andrés Sabido e Isidro. Y los tres nuevos fichajes del Club. Enrique Wolff, Uli Stielike y, por supuesto, Juanito. El astro malagueño inició aquella campaña 1977-78 una longeva carrera como madridista que le llevaría a convertirse en una de las grandes leyendas del Club.

Juanito se convirtió en un fijo en las alineaciones del Real Madrid de finales de los setenta y principios de los ochenta. Formó pareja de ataque con Carlos Santillana durante varias campañas.

Juanito y Matthäus

Miércoles 8 de abril de 1987. El Real Madrid juega en Múnich frente al Bayern el encuentro de ida de las semifinales de la Copa de Europa. Un día triste. El partido se puso cuesta arriba desde que en el minuto 10 el defensa Augenthaler perfora la portería de los blancos. Tampoco ayuda en nada una labor arbitral manifiestamente mejorable. En el minuto 28 el colegiado escocés Robert Valentine se inventa un penalti inexistente en contra del Madrid. Paco Buyo detiene un balón dentro del área y el jugador local Donfner, que viene en carrera, cae por inercia. El trencilla señaló el punto de castigo ante las justificadas protestas de los futbolistas blancos. En el minuto 36 Wolfarth marca el 3-0 para los de casa. El partido marchaba francamente mal. Fueras de juego que no eran, saques de esquina erróneos, faltas inexistentes en contra del equipo de Leo Beenhakker... Pero lo peor estaba a punto de llegar.

Minuto 39. Juanito trata de controlar un balón acosado por un futbolista alemán. Lo consigue pero otro defensa germano le entra fuerte y le consigue arrebatar el balón, que sale despedido hacia el centro del campo. Miguel Porlan 'Chendo' corre hacia el centro para hacerse con el esférico y en ese momento Lothar Matthäus realiza una durísima entrada sobre el defensa de Totana. Una escalofriante entrada de tarjeta roja. Chendo rueda por el suelo y se levanta a por Matthäus, que cae al suelo. Juanito corre hacia el futbolista del Bayern, con el árbitro allí justo al lado, y el de Fuengirola le acaba pisando la cabeza a Matthäus.

De aquel día, muchos se han quedado sólo con el pisotón de Juanito. No se puede justificar aquello, por supuesto. Pero es justo que se recuerde también que su reacción, censurable, viene provocada por aquella violenta entrada de Matthäus a Chendo. Insisto, en cualquier caso, en que no hay justificación a lo que hizo Juanito. 

El colegiado, como no puede ser de otra manera, se fue a por Juanito y le enseñó la tarjeta roja. Ricardo Gallego, rápidamente, se lanzó a por el malagueño y le rodeó los brazos sujetándolo. Juanito se dirigió a la banda, expulsado. Desde el banquillo salieron sus compañeros, Salguero, Ochotorena y Solana. Agustín abrazó a Juanito y le acompañó a los vestuarios. Mientras atravesaban la pista de atletismo del Olímpico de Múnich dos periodistas, uno de ellos actualmente un tertuliano muy famoso, le meten el micrófono. Me imagino que Juanito en aquellos momentos no tendría muchas ganas de hablar... Hay una famosa fotografía de aquel momento.

Matthäus sólo vio amarilla por su dura entrada sobre Chendo. El partido continuó con el 3-0 y el Real Madrid con un hombre menos. Butragueño consiguió recortar distancias justo antes del descanso, al que se llegó con 3-1. Sin embargo, en el segundo tiempo, una ingenua mano del defensa Mino dentro del área supuso un nuevo penalti. El segundo para el Bayern. Esta vez sí que lo era. Clarísimo. Matthäus ejecutó el disparo desde el punto de castigo y subía el 4-1 al marcador. La cosa pintaba muy mal. Para rematar la noche, en el minuto 72 Mino recibió la segunda amarilla y también era expulsado. El Madrid jugó más de un cuarto de hora con sólo nueve futbolistas sobre el césped. Al menos no hubo más goles...

Reacción de Juanito

¿Qué se le pasaría por la cabeza a Juan Gómez 'Juanito' dentro del vestuario tras su expulsión? Quienes estuvieron allí siempre cuentan que Juanito estaba destrozado y que no paraba de pedir perdón a sus compañeros por lo que había sucedido. Impresionan las declaraciones que efectuó a la televisión sobre el mismo césped del Olympiastadion München minutos después de acabar el partido. Juanito se mostraba abatido y totalmente arrepentido. 

"Yo por lo menos en mi carrera deportiva he sido una persona que he tenido dos 'yo'. Y hoy ha podido el 'yo' malo, el 'yo' irracional ha podido al 'yo' racional y he cometido una torpeza que... vamos, que estoy total y absolutamente arrepentido. Lo siento al jugador que le he hecho eso y… No puedo decir otra cosa. Sé que he metido la pata, que he cometido esta torpeza. Pero aquí el único perjudicado al fin y al cabo siempre es uno y… Bueno, uno, el equipo… Pero bueno, yo lo único que puedo decir es que me maldigo. Maldigo ese comportamiento tan irracional que lo había domado. Lo había tratado de educar durante unos años pero hoy ha salido otra vez. Y lo siento. Lo siento a todo el mundo que lo haya visto", declaraba Juanito. 

En el libro Juanito, todo corazón, de Pascual P. Hernández, publicado por el diario As, el autor recoge las declaraciones que realizó a los enviados de ese periódico. Palabras muy similares a las que dijo ante las cámaras de televisión. "Ha reaccionado mi otro yo, lo malo que hay en mí. No debí reaccionar así. Nunca me había pasado algo parecido en mi carrera. Quiero que me comprendan. En ese momento no era yo. Es el cabreo que te ciega. Sinceramente, no sabía lo que hacía. Ha sido la torpeza más grande de mi carrera deportiva. Las dos patadas que le di a Matthäus cuando cayó al suelo fue una reacción inconsciente. Además, el que más perjudicado ha salido he sido yo mismo", comentaba Juanito para el diario As.

La UEFA fue muy dura con Juanito. El pisotón a Matthäus le costó al futbolista una sanción por inhabilitación de cuatro años que concluiría el 31 de julio de 1991. En un primer momento el organismo europeo, por error, comunicó que el castigo era de cinco años. Dos días más tarde la UEFA rectificaba y aclaraba que eran cuatro años y no cinco. En realidad, daba lo mismo.  Juanito tenía en aquellos momentos 32 años, camino de los 33. La sanción suponía un adiós definitivo a las competiciones europeas y, por extensión, su adiós al Real Madrid.

Hicieron las paces 

El miércoles 22 de abril de 1987 se disputó la vuelta. El Real Madrid venció 1-0 al Bayern con un gol de Santillana. Un triunfo insuficiente. El global fue de 4-2 favorable a los alemanes, que accedieron a la gran Final que se disputó aquel año en Viena.

Un día antes del partido, el martes 21 de abril, con los alemanes ya en Madrid, se produjo un encuentro que no suele recordarse cuando se evoca el episodio del pisotón a Matthäus. El jugador alemán y Juanito se reunieron en la sede del diario As. Allí mismo hicieron las paces. Pascual P. Hernández recoge los detalles de ese encuentro amistoso en su libro. "Tras estrecharse las manos, Juanito se disculpó, le pidió perdón a Matthäus y, como recuerdo del encuentro, le regaló estoque y una muleta", relata. "Ahora, si quieres, me puedes matar", le comentó Juanito al centrocampista germano al entregarle el estoque y la banderilla. Según se puede leer en el libro, Matthäus agradeció el gesto y respondió: "Esto lo tendré en el lugar más visible de mi casa como un imborrable recuerdo tuyo y de tu patria". Los dos futbolistas se abrazaron y Matthäus sentenció: "Me has demostrado que eres un caballero". De aquel encuentro proviene la famosa imagen que tomó el fotógrafo Agustín Vega para As.

Lamento mucho que esta parte de la historia de aquel incidente entre Juanito y Matthäus no sea tan conocida. Generalmente todo lo que se recuerda de aquello es el pisotón. Muchos utilizan aquel capítulo para menoscabar y desacreditar la figura de Juanito.

Juanito se equivocó. Aquello fue un grave error por su parte, sí. No hay justificación ninguna a lo que hizo. No debió hacerlo. Pero lo hizo. Y fue castigado por ello. El de Fuengirola sabía que había actuado mal y lo reconoció. Lo reconoció aquella misma noche sin rodeos. Admitió su culpa y pidió perdón. Pidió perdón a todo el mundo. Al público, a los aficionados, a sus compañeros y, sobre todo, al propio afectado. A Lothar Matthäus. Ese era realmente Juanito. Yo quiero quedarme con esa imagen de los dos jugadores abrazándose y sonriendo en el diario As después de haber hecho las paces.

La sanción por cuatro años de la UEFA tras el pisotón de Múnich cercenó la etapa de Juan Gómez 'Juanito' en el Real Madrid. El jugador tenía 32 años y la imposibilidad de participar en competiciones europeas era un lastre demasiado pesado. En mayo de 1987 el Club le concedió al malagueño la libertad para negociar con otro equipo. El futbolista se despidió del público del Bernabéu levantado a hombros por sus compañeros al término del último partido de Liga de aquella temporada 1986-87, un Real Madrid-Español disputado el domingo 21 de junio de 1987. Con un nuevo título de Liga debajo del brazo. Se marchó del Madrid con cinco Ligas, dos Copas de la UEFA, dos Copas del Rey y una Copa de la Liga. 

Jugó 474 partidos con la camiseta blanca, contando partidos oficiales y amistosos.
Marcó 153 goles contando partidos oficiales y amistosos.

En competición oficial, jugó 401 partidos oficiales.
Marcó 121 goles.
284 de Liga, en los que marcó 85 goles.
50 de Copa en los que marcó 15 goles.
22 de Copa de Europa en los que marcó 8 goles.
24 de Copa de la UEFA en los que marcó 5 goles.
9 de Recopa de Europa en los que marcó 4 goles.
11 de Copa de la Liga en los que marcó 4 goles.
1 de Supercopa de España. 
 
Ganó 5 Ligas. 2 Copas del Rey. 2 Copas de la UEFA. 1 Copa de la Liga. Ganó 1 Trofeo Pichichi con 17 goles en la temporada 1983-84.

Tras el Real Madrid 
  
Juanito puso fin a una etapa de diez años como jugador del Real Madrid. Pero ni mucho menos iba a colgar las botas. La salida que tomó fue la mejor posible. Málaga. Regresó a su tierra, cerca de su casa y cerca de los suyos. El equipo de La Rosaleda estaba en Segunda División pero realizó varios fichajes de relumbrón. Junto a Juanito llegó otro veterano, Esteban Vigo, ex futbolista del Barcelona. Para dirigir al equipo se fichó al ex seleccionador español Ladislao Kubala. Juanito se reencontraba así con el técnico que le había hecho debutar con la camiseta de España en el año 1976.

El equipo funcionó. El Málaga fue Campeón de la Segunda División 1987-88 con Juanito como estrella. Sólo se perdió un partido de Liga. Jugó 37 partidos, todos ellos como titular y marcó diez goles. El equipo consiguió el ascenso a falta de cinco jornadas para el final. Juanito volvía a Primera División.

El de Fuengirola siguió siendo asiduo en el equipo malagueño también en Primera. Durante el ejercicio 1988-89 el jugador, por supuesto con el 7 a la espalda, disputó un total de 34 partidos. Marcó cinco goles. Uno de ellos, curiosamente, lo anotó frente al Real Madrid. Fue el domingo 4 de junio de 1989 en La Rosaleda. Juanito, con 34 años largos, cuajó una gran actuación frente a sus compañeros. Botó el córner con el que los malagueños empataban 1-1 tras adelantarse el Madrid. Ya en el segundo tiempo, Juanito materializó un auténtico golazo. Pura técnica. Se deshizo de Sanchís, sorteó una entrada de Gordillo y desde fuera del área lanzó una vaselina que sorprendió a Paco Buyo para poner por delante a su equipo. Posteriormente, Hugo Sánchez empató al anotar el definitivo 2-2 de falta.

A la conclusión de aquella temporada, en el verano de 1989, Juanito decidió dejar el fútbol activo. El sábado 27 de junio, el jugador escenificó su retirada con un partido homenaje en La Rosaleda en el que estuvieron presentes muchos de sus ex compañeros. Aquel día, de manera simbólica, el torero Curro Romero le cortó la coleta a Juanito.

Director técnico  

Juanito siguió en el Málaga. Pasó del terreno de juego a los despachos como director técnico. El 29 de octubre de 1989 el semanal As Color publicó una entrevista con el ex jugador en la que reconocía sin tapujos que aquel nuevo rol no le terminaba de satisfacer. "Esta función que ahora asumo no me llena. No soy feliz como director técnico. He comprobado, cuando me he retirado del fútbol y he aceptado este cargo, que hay mucho imbécil en el fútbol. Son demasiadas las dificultades que encuentras para realizar una buena labor. En un club grande, desde luego, debe ser diferente, pero en una entidad modesta, caso del Málaga, no es nada fácil trabajar. ¡La cantidad de cosas que hay que hacer! Y el problema no es otro que económico. Tenemos dos campos de fútbol para once equipos. Así es imposible sacar futbolistas. Menos mal que los chavales no se aburren. Y, bueno, si se aburren no se les nota. Soy de los que pienso que un club modesto se debe nutrir de su cantera", contaba Juanito al periodista Luis Miguel González.

En aquella entrevista para el número 194 de As Color el de Fuengirola hablaba de las razones por las que había colgado las botas pocos meses antes. "Me retiré definitivamente por dos razones. Una, porque tengo que estar dos años en categorías inferiores para luego poder acceder al curso nacional de entrenadores. La otra razón, porque veía difícil que pudiera jugar esta temporada. Ante la duda, decidí marcharme", confesaba Juanito.

Luis Miguel González le preguntaba si le había faltado salir por la puerta grande como futbolista. "La gente puede pensar lo que quiera, pero yo del Real Madrid no me fui por la puerta de atrás. Soy el primero en reconocer que en alguna ocasión manché la imagen del Madrid. Como no podía jugar en los torneos europeos, lo mejor era marcharme. Vine al Málaga y creo que mi rendimiento fue pleno. El primer año ascendimos a Primera y en el segundo logramos mantenernos. Por tanto, ya le digo, no pienso que me he ido del fútbol por la puerta falsa", respondía Juan.

El ex jugador internacional hacía también en aquellas páginas una reflexión sobre el mundo del fútbol. "Falta humanidad en este deporte. Sin lugar a dudas, era más feliz como jugador que como director técnico. Falta armonía, comprensión. El ser humano se está volviendo desconfiado. No sé por qué, pero todos desconfiamos del que está al lado. Cuando estás arriba no tienes que rendir cuentas a nadie. Pero cuando están por encima de ti hay personas que te quieren hacer la pascua. No faltan, desde luego, las zancadillas", apuntaba un Juanito que realizaba una sentida confesión. "Yo lo que quiero es entrenar. Ahora llevo la selección infantil de Málaga. Me divierto con los chavalines, aunque cuando más disfruto es jugando una 'pachanga' con los compañeros o cuando me llaman para actuar en un partido amistoso. El despacho me quema. Me encuentro sin aire entre esas cuatro paredes", reconocía. 
  
Efectivamente, Juanito no iba a aguantar mucho como director técnico. Pero resulta curioso que antes de llegar a los banquillos como entrenador tuviese un efímero regreso como jugador en la temporada 1990-91. En abril de 1991 descolgó las botas para vestir la camiseta de Los Boliches, conjunto entonces encuadrado en el Grupo Tercero de Segunda División B. Fue una etapa corta. En total, cinco partidos de Liga.

Juanito en Mérida

Ya había comenzado la temporada 1991-92 cuando Juan Gómez González inició una nueva etapa como profesional en el mundo del fútbol. Lo había sido todo como futbolista. Había comprobado que la dirección técnica no colmaba sus aspiraciones. No estaba hecho para los despachos. Juanito quería entrenar. Y su primera experiencia en los banquillos a nivel profesional le llevaría a Extremadura.

El martes 12 de noviembre de 1991 el Mérida, en Segunda División, contrató a Juan Gómez como entrenador para sustituir a Eduardo Caturla Vázquez, que estuvo al frente del equipo durante las once primeras jornadas de Liga. Juanito debutó en los banquillos en San Mamés, en un partido frente al Bilbao Athletic que concluyó con triunfo del equipo emeritense por 1-2. Fue el domingo 17 de noviembre de 1991.

Aquella etapa en el Mérida ha quedado plasmada al detalle en el libro 'Juanito. Sus 141 días como entrenador', escrito por Manuel Jiménez 'Lolino', preparador físico del equipo que compartió horas y horas de trabajo y vivencias junto a Juan durante aquellos meses. Esta obra recoge numerosas anécdotas de los meses que el de Fuengirola permaneció al frente del equipo y ofrece un preciso retrato del Juanito entrenador.

2 de abril de 1992

Una fecha, sin duda, muy triste. El 2 de abril de 1992, Juanito regresaba en coche a Mérida tras haber presenciado el encuentro de ida de las semifinales de la Copa de la UEFA de aquella edición 1991-92 entre el Real Madrid y el Torino italiano. Juan viajaba acompañado por su preparador físico en el Mérida, Manuel Jiménez 'Lolino'. Delante de ellos viajaban, en otro vehículo, tres de sus jugadores, Ricardo Sanz Hernandorena, Pepe Pla Omenat y Javier González Etxebarria. Un viaje que terminó en tragedia...

El accidente tuvo lugar en torno a las dos de la madrugada de la noche del 1 al 2 de abril a la altura del kilómetro 161 de la N-V en el término municipal de Calzada de la Oropesa, Toledo. Los dos automóviles se encontraron con un camión accidentado que había perdido su carga de troncos de madera por la carretera. El primer vehículo, el de los jugadores, consiguió superar los obstáculos. El coche en el que viajaban Lolino y Juanito, al tratar de esquivar los troncos, chocó contra un segundo camión que había estacionado en el arcén para socorrer al primero. En el terrible impacto Juanito, que viajaba dormido en el asiento del copiloto, murió en el acto.