FRANCIS

Francisco Javier Rodríguez Hernández jugó cuatro partidos en la temporada 1985-86

Francis, defensa del Castilla durante la temporada 1985-86, fue uno de los futbolistas del filial con presencia en el primer equipo durante aquel ejercicio. Dado que estoy recordando a algunos de los futbolistas que jugaron durante aquella campaña de hace treinta años, me apetecía dedicarle una entrada a este jugador que, procedente de la cantera, también tuvo el privilegio de llegar a vestir la camiseta del primer equipo del Real Madrid.

Francisco Javier Rodríguez Hernández nació en Tejina, Santa Cruz de Tenerife, el 18 de diciembre de 1962. Llegó al Real Madrid con sólo dieciseis años para jugar en las categorías inferiores. Los inicios fueron algo duros por razones de adaptación, tal y como recordaba posteriormente en una entrevista que le hicieron en el boletín oficial del Club. "Lo pasé muy mal al principio, porque con dieciséis años el dejar tu pueblo, tus padres, tu familia y venir a una ciudad tan grande y lejana me hizo pasar una crisis grande. Menos mal que en esos momentos me ayudó bastante un amigo de Madrid y me subió los ánimos, porque estuve a punto de irme, ya que lo pasé muy mal. También tengo que agradecérselo al club que me apoyó bastante en el aspecto moral, a los compañeros que con su animación, su juventud, me hicieron pasar ese momento. Yo veía que la gente que había aquí era muy buena, te apreciaban y te ayudaban. Eso es una cosa que nunca se olvida", rememoraba el futbolista.

Francis terminó aclimatándose a la capital de España y fue progresando en la cantera blanca y en las categorías inferiores de la Selección. Fue Internacional juvenil, Sub-16, Sub-18, Sub-19, Sub-20 y Sub-21. En la temporada 1981-82 llegó al Castilla en Segunda División. Jugaba de defensa y empezaba a destacar en el puesto de líbero.  

Francis fue uno de los jugadores del filial que debutaron en Primera División en el partido de Castellón que coincidió con la huelga de jugadores profesionales. El Real Madrid jugó aquel 11 de abril de 1982  con Ochotorena, Juanito, Casimiro, Salguero, Espinosa, Fraile, López Miró, Francis, Juliá, Míchel (Chendo, 86') y Serrano (Bernardo, 59'). Francis debutó en Primera, por tanto, el mismo día que Ochotorena, Fraile, Míchel o Chendo.

De hecho, Francis coincidió de pleno con el grueso principal de la Quinta del Buitre. El tinerfeño fue titular del Castilla en las temporadas 1982-83 y 1983-84. En el verano de 1983 incluso llegó a realizar la pretemporada con el primer equipo.

En marzo de 1984 la revista Real Madrid, en su ejemplar número 406, le dedica dos páginas en una entrevista que firma Lorenzo Martínez Suárez. En ella, Francis habla del gran momento que atravesaba en lo personal y en lo colectivo gracias a la buena marcha del filial, en el que cumplía su tercera temporada. "Es el mejor momento de las tres temporadas que llevo. Siempre ha estado bien el equipo, pero en ésta pienso que se está superando a las anteriores y ello representa mucho para nosotros, porque es el resultado a un trabajo que se está realizando desde hace tiempo. Un esfuerzo que nos valdrá para nuestro futuro, ya que, aunque todos no podemos subir al primer equipo, tarde o temprano nos saldrán otros lugares a donde ir. Y estando arriba más suenan nuestros nombres, pero nuestra ilusión desde luego es el Real Madrid", afirmaba Francis. 

En aquella entrevista se desglosaban algunas de las virtudes de Francis. "Se dice que es un líbero que aúna fuerza, calidad, visión de juego y que sube con facilidad al ataque, prueba de ello están los goles marcados por él", escribía Lorenzo Martínez Suárez. "Me agrada mucho lo que dices, pero la verdad es que no sé si esto es cierto. Desde luego, tendré mis cualidades, mejores o peores, pero en el campo no pienso en ello y lo único que trato es de hacerlo lo mejor posible. Para esto me ha influido mucho que el vestir la camiseta del Madrid supone el darlo todo en el campo y estoy muy mentalizado con ello. En el terreno de juego me transformo mucho, tal vez no soy el mismo cuando entreno y cuando juego los domingos", respondía el futbolista.  

Francis reconocía que su mejor recuerdo era el de haber fichado por el Real Madrid. También reconocía la "satisfacción" que le producía ver cómo iba progresando como jugador. "Mi máxima ilusión es llegar al primer equipo. Espero que con el trabajo lo pueda hacer, para mí esa es mi meta y ese día me llevaría una gran alegría", apuntaba Francis. En el momento de realizarse la entrevista, cuatro de sus compañeros del Castilla ya habían dado el salto al primer equipo: Sanchís, Martín Vázquez, Pardeza y Butragueño. "Me ilusiona mucho, estoy muy contento con ellos, ya que son grandes compañeros y amigos y porque eso quiere decir que pronto a lo mejor estamos otros. Ojalá siga la racha, esto querría decir que el Castilla va bien, funciona y cuenta con buenos jugadores", apuntaba el tinerfeño al respecto. La siguiente pregunta, por tanto, era lógica. ¿Cuándo se produciría el salto de Francis? "¡Uff! Es difícil de decir. Esa es mi máxima aspiración y mi mayor ilusión. Me gustaría triunfar en el mundo del fútbol y sobre todo vistiendo la camiseta del club que para mí representa todo: el Real Madrid", respondía el canterano.

El Castilla de aquella temporada 1983-84 terminó adjudicándose el título de Campeones de Segunda División. Francis sólo se perdió un partido de Liga. Jugó 37 partidos completos en la competición de la regularidad siendo uno de los pilares del equipo de Amancio Amaro.

De cara a la temporada 1984-85 el nombre de Francis llegó a sonar para el primer equipo. De hecho, la colección de la Liga de Ediciones Este llegó a editar su cromo en su sección 'últimos fichajes' como jugador del Real Madrid.

Sin embargo, Francis fue cedido al Valladolid, lo que le sirvió para jugar de manera asidua en Primera División a lo largo de la campaña 1984-85 y para estrenarse en competiciones europeas. Los vallisoletanos disputaron la Copa de la UEFA al haberse proclamado campeones de la Copa de la Liga la temporada anterior y Francis jugó dos partidos en esa competición. "Esa cesión era muy importante para mí, porque tenía bastante claro que si me salían las cosas normalmente bien, como venía haciéndolas hasta entonces en el Castilla, mi regreso al Real Madrid era más factible. Luego, en cambio, sucedieron una serie de circunstancias, lesiones, etc., que los que estamos metidos de lleno en el mundo del deporte debemos esperar, aunque no deseemos que nos sucedan. Esto hizo que mi estancia en Valladolid no fuera tan brillante como en un principio esperaba", reconocía Francis posteriormente. 

Temporada 1985-86

Al término de la cesión Francis regresó al Real Madrid. La temporada 1985-86 la comienza jugando con el Castilla. "Empecé la temporada jugando en la defensa, que modestamente pienso es mi verdadero sitio, pero después, al tener que acoplar a nuevos jugadores a esa línea, me tocó  realizar mis funciones en el centro del campo. Yo lo acepté, porque me debo a las decisiones de mi entrenador y traté en todo instante de hacerlo lo mejor que sabía. Siento si las cosas no salieron del todo bien", analizaba posteriormente el jugador sobre su actuación de ese año en el filial.

No obstante, Francis tuvo la satisfacción de jugar un partido en Primera División con el primer equipo. Fue el domingo 19 de enero de 1986 en Santander, en el encuentro correspondiente a la vigésimo primera jornada de Liga. El tinerfeño fue aquel día titular en el equipo de Luis Molowny que formó con la siguiente alineación: Agustín, Chendo, Maceda, Salguero, Francis, Míchel, Gallego, Juanito, Santillana, Hugo y Valdano. En el minuto 64 entró en el terreno de juego Butragueño en lugar, precisamente, de Francis. El equipo blanco perdía 1-0 y terminó empatando 1-1 gracias a un tanto del Buitre.

"Es muy bonito para cualquier jugador haber participado, aunque sea poco, en una liga de Primera División que ha constituido un gran éxito para el Real Madrid. Pienso que el equipo demostró sobre el terreno de juego, a lo largo de las treinta y cuatro jornadas, que era superior a todos los demás. Ahí está la gran diferencia de puntos conseguidos y los récords batidos. Para mí, que actué tan sólo unos minutos, será un recuerdo imborrable y maravilloso", recordaba el propio Francis al término de una temporada que se saldó con el título de Campeones.

Aquel partido frente al Racing de Santander no fue el único que jugó con el primer equipo. Francis participó en las tres competiciones nacionales que disputó el Real Madrid en la temporada 1985-86. "Aunque poco, estoy satisfecho de haber podido vestir la elástica del Real Madrid tanto en la Liga, la Copa del Rey como en la Copa de la Liga", afirmaba el futbolista en la entrevista que concedió a la revista del Club en junio de 1986.

Precisamente los dos últimos partidos que jugó el Madrid aquella temporada fueron los de la Copa de la Liga, competición que desapareció tras la edición celebrada en 1986 y que había levantado más críticas que alabanzas en los pocos años que se jugó. "Yo la he dado muchísima importancia. Está claro que de cara al espectador tal vez carezca de interés y que incluso tras una larga campaña y con el buen tiempo prefieran otras opciones, es comprensible. Lo que ocurre es que para jugadores como los que están en mi caso, que no tenemos un destino aún fijo y deseamos estar en las primeras plantillas de los clubes en que brindamos nuestros servicios, es una magnífica oportunidad para actuar ante grandes equipos y demostrar nuestra valía. La pena es que tan sólo hemos podido actuar durante dos encuentros", señalaba el futbolista sobre la competición que acababan de jugar.

Lorenzo Martínez le preguntaba a Francis si pensaba que aún tenía que demostrar algo. "Creo que no. Pese a ser un jugador nacido fuera de Madrid, me considero un integrante de la cantera. Llevo siete años en el Real Madrid, donde ingresé en juveniles, y pienso que en el club ya saben hasta dónde puedo llegar, lo que puedo dar de sí, mis cualidades y si puedo o no serles útil para la primera plantilla. Esto, una vez llegado el momento de la decisión sobre mi ascenso o no, supongo importará más que otras circunstancias. Lo que sucede es que siempre es conveniente aprovechar todas las oportunidades que se te puedan presentar y tratar de hacerlo lo mejor posible. Por otra parte, quién puede asegurar que en estos encuentros no me esté jugando mi futuro", respondía Francis.

En total,  Francis disputó cuatro partidos oficiales con el primer equipo del Real Madrid en la temporada 1985-86. Uno de Liga, uno de Copa y dos de Copa de la Liga. 

No siguió en el Real Madrid. El fichaje de Mino para la defensa complicó las posibilidades de dar el salto definitivo a la primera plantilla. La lesión de Maceda en el Mundial de México quizás le hubiese permitido ascender al primer equipo, pero finalmente fue su compañero del filial Juan José Jiménez Martos, capitán del Castilla, el que ocupó una plaza como defensa en la nueva plantilla de Leo Beenhakker. Francis, que ya había jugado una temporada completa en Primera División con el Valladolid, tenía experiencia, calidad y necesitaba minutos en la máxima categoría. Se iniciaba una nueva etapa para él.

Tras salir del Real Madrid,  Francisco Javier Rodríguez Hernández recaló en el Español. Allí estuvo tres temporadas y en la segunda, campaña 1987-88, su equipo fue subcampeón de la Copa de la UEFA. En la temporada 1988-89 el conjunto periquito descendió a Segunda División, pero Francis siguió jugando en Primera enrolándose en el equipo de su tierra, el Tenerife. Con el equipo chicharrero jugó otras tres temporadas, 1989-90, 1990-91 y 1991-92. Las temporadas 1992-93, 1993-94 y 1994-95 las jugó ya en Segunda División con el Atlético Marbella. 

Epílogo

A los cuatro encuentros oficiales que jugó en la temporada 1985-86 hay que sumarle el disputado en la temporada 1981-82 en Castellón. El canterano disputó, por lo tanto, cinco encuentros con la camiseta del Real Madrid, además de algún encuentro de carácter amistoso. Me gusta recordar a todos los futbolistas que han llevado la camiseta del Madrid, independientemente del número de veces que lo hiciesen. Por tanto, es justo valorar a canteranos como Francis, que pusieron su granito de arena con su esfuerzo y dedicación a hacer un poco más grande al Club en el que se formó como futbolista profesional.