OTRA REMONTADA FRENTE AL INTER DE MILAN

Se cumplen treinta años de otra grandiosa noche europea de los ochenta

No creo que los seguidores del Inter de Milan guarden un buen recuerdo de los enfrentamientos europeos que los transalpinos disputaron con el Real Madrid allá en la década de los ochenta. Fueron varios cruces en varias competiciones y el Madrid siempre salió bien parado. En la temporada 1980-81 los blancos eliminaron a los interistas en las semifinales de la Copa de Europa. En la 1982-83 el Madrid doblegó al Inter en los cuartos de final de la Recopa de Europa. En la 1984-85, como ya recordé hace un año, dejamos en la cuneta a los italianos en las semifinales de la Copa de la UEFA...

Un año más tarde, en la temporada 1985-86, el Inter de Milan y el Real Madrid volvieron a verse las caras otra vez en las semifinales de la Copa de la UEFA. Para el equipo italiano se trataba de una clara ocasión de vengarse del equipo que doce meses antes le había privado de la oportunidad de acceder a la Final.

El miércoles 2 de abril de 1986 se disputó en el Giusseppe Meazza el encuentro de ida de aquellas nuevas semifinales. El Real Madrid, que llegaba ya a la cita como Campeón de Liga 1985-86, perdió en Milán 3-1 un partido que se le puso cuesta arriba muy pronto. Se ve que nos tenían muchas ganas. El caso es que a los dos minutos de empezar a rodar el balón Marco Tardelli anotó el 1-0 para los de casa. Ya en el segundo tiempo, de nuevo Tardelli anotó un servicio de cabeza del alemán Karl-Heinz Rummenigge para colocar un 2-0 en el marcador que ponía en serios aprietos al vigente campeón de la competición. Cuando faltaban tres minutos para llegar al noventa reglamentario Jorge Valdano marcó el 2-1, un resultado bastante interesante de cara a la vuelta teniendo en cuenta cómo estaban marchando las cosas aquel día. Sin embargo, sólo un minuto después, un gol en propia puerta de Salguero suponía el definitivo 3-1 favorable al Inter. 

Toca remontada 

Sí. Otra vez. Tocaba remontar otra vez. Y tocaba remontar otra vez frente al Inter de Milan. Quedaban al menos otros noventa minutos en el Bernabéu que, como ya había pronosticado con acierto Juanito un año antes, iban a ser "molto longos"...

El encuentro de vuelta se disputó dos semanas después, el miércoles 16 de abril de 1986. Es decir, tal día como hoy de hace treinta años. 

El Real Madrid, como no podía ser de otra forma, salió a la carga desde que se escuchó el pitido inicial del colegiado holandés Jan Kelzer. De hecho, fueron los blancos los que sacaban de centro del campo. Los jugadores de Luis Molowny no perdían el tiempo a la hora de tratar de llevar el balón a las inmediaciones del área de los visitantes. En punta, tres delanteros: Santillana, Hugo Sánchez y Butragueño. Ayudándoles, detrás de ellos, futbolistas con un claro perfil ofensivo como Míchel o Gordillo. Se necesitaban goles aquella noche. Las jugadas de ataque empezaron a dar sus frutos y los madridistas forzaron varios saques de esquina y fueron acumulando llegadas al área.

Sin embargo, antes de alcanzarse el primer cuarto de hora llegó la mala noticia de la noche. En concreto en el minuto 13, Manolo Sanchís se rompió el peroné y los ligamentos del tobillo izquierdo cuando trataba de arrebatar el balón al italiano Altobelli en la banda derecha. Sanchís se dio cuenta al momento de que se había lesionado de gravedad. Se levantó y empezó a caminar cojeando ostensiblemente en dirección a los banquillos, que estaban en el otro lateral del campo, a la izquierda del ataque blanco. El juego no se detuvo. Mientras el defensa salía del campo a duras penas y por su propio pie los dos equipos seguían disputando el balón. Inmediatamente fue trasladado a la Clínica de La Fraternidad de Madrid, donde se confirmó el alcance de la lesión, siendo intervenido quirúrgicamente esa misma noche. Aquella rotura de peroné le privó a Sanchís de jugar el Mundial de México que se iba a disputar dos meses después y para el que ya tenía plaza confirmada en la Selección de Miguel Muñoz.

José Antonio Salguero entró al campo para sustituir al lesionado Sanchís en la defensa. El dibujo del equipo seguía siendo el mismo. Hubo que esperar a las postrimerías del primer tiempo para asistir al primer gol de la noche. Llegó desde los once metros al transformar Hugo Sánchez un lanzamiento de penalti por derribo de Baresi a Míchel. Con el 1-0 se llegaba al descanso. 

El segundo tiempo empezó con un más que posible penalti sobre Butragueño que el colegiado no señaló. El Madrid insistía. En el minuto 50 Míchel envió un centro chut de rosca desde la derecha y el esférico golpeó en el larguero de la portería del Inter. Se necesitaba otro gol para superar la eliminatoria y este llegó en el minuto 64. Ricardo Gallego recibió un pase de Chendo por la derecha y envió un centro al área que fue cabeceado a la red por Rafael Gordillo picando hacia abajo. El 2-0 valía para pasar la eliminatoria.

Pero la alegría duró muy poco. Un par de minutos después era Míchel el que cometía penalti sobre el interista Collovati. Brady, desde el punto fatídico, envió el disparo a las mallas sin que Agustín pudiera remediarlo. El 2-1 le daba el pase al Inter. Había que anotar otro gol para, al menos, igualar la eliminatoria y forzar la prórroga.

Y el gol acabó llegando... ¡Otra vez de penalti! La tercera pena máxima de aquel encuentro llegó por un clarísimo derribo a Emilio Butragueño dentro del área. El Buitre tuvo una grandísima actuación aquella noche y fue una constante pesadilla para la defensa italiana. Volvió a poner el balón en el punto de castigo Hugo Sánchez y el mexicano, de nuevo, acertaba con el gol para colocar el 3-1 con el que se forzaba la prórroga. Era el minuto 74. Quedaba poco más de un cuarto de hora para llegar al noventa, pero el marcador ya no se movería.

A la prórroga 

Con el 3-1 con el que acabó el tiempo reglamentario no quedó más remedio que disputar otra media hora para dilucidar cuál de los dos equipos pasaría a la Final. Y a los tres minutos de arrancar el tiempo extra apareció el que faltaba. La bestia negra del Inter: Carlos Santillana. El ariete cántabro apareció con un gol 'marca de la casa' para decantar la balanza del lado madridista. Fue en un saque de esquina botado por Hugo Sánchez y que fue cabeceado por el delantero para colocar un 4-1 en el electrónico. 

El Santiago Bernabéu casi se cae cuando en el minuto 109 llegó el quinto tanto de los de Luis Molowny. Los italianos estaban volcados tratando de hacer gol y un balón largo de Gallego permitió a Butragueño montar un contragolpe. El Buitre avanzó con el balón mientras Hugo Sánchez, por la derecha, y Santillana, por la izquierda, corrían para ayudar en ataque a su compañero. Era un tres para dos. Butragueño, que se había frenado ante un defensa, pasó el balón a la derecha y Hugo lanzó un pase al centro del área donde Santillana aguardaba para fusilar a placer a Zenga.

Santillana, que llevó el brazalete de capitán, lució el dorsal número 11 en aquel partido. El 9 lo llevó Hugo. Daba igual. Aunque no llevara su clásico 9 a la espalda el cántabro volvió a ser decisivo frente al Inter haciendo lo que mejor sabía hacer. Marcar goles. Era su cuarta eliminatoria europea frente al cuadro Neroazzurro y había conseguido hacer goles en las cuatro. Sin duda, era el jugador que más temían sus rivales interistas. Y no era para menos. En aquel partido firmó dos dianas, las dos de la prórroga que servían para dejar al Inter fuera de la Final de la UEFA por segundo año consecutivo. "Marqué dos goles muy importantes, pero fueron obra de todo el equipo. La victoria es general. Tuve la fortuna de hacer dos tantos, y ese es un buen balance para mí. Sin embargo, lo fundamental es el nuevo éxito del club. Este es otro gran día para el Real Madrid", aseguraba Carlos Santillana al término del partido.
 
Sí. Aquel 16 de abril de 1986 el Real Madrid protagonizó otra de sus grandes noches europeas. Los noventa minutos en el Bernabéu habían vuelto a ser "molto longos". Y no digamos ya los 120, prórroga incluida. La gente se lo pasó en grande en el Bernabéu y coreó con 'olés' las últimas acciones del partido. Se había remontado otra vez para acceder de nuevo a la Final de la Copa de la UEFA. El rival sería el Colonia alemán y el Campeón se decidiría a doble partido. Pero eso será otra gesta que recordaremos dentro de unas semanas aquí en 'Historias del Real Madrid'.

REAL MADRID CF, 5 

Agustín, Chendo, Camacho, Maceda, Sanchís, (Salguero, 13'), Gordillo (Juanito, 111'), Butragueño, Michel, Hugo Sánchez, Gallego, Santillana.

INTER DE MILAN, 1 
Zenga, Bergomi, Mandorlini, Baresi, Collovati, Ferri, Fanna, Tardelli, Altobelli, (Marini, 50'), Brady, Rummenige (Bernazzani, 83'). 

GOLES 
1-0 min. 44 Hugo Sánchez (penalti)

2-0 min. 63 Gordillo

2-1 min. 65 Brady (penalti)

3-1 min. 74 Hugo Sánchez (penalti)

4-1 min. 93 Santillana

5-1 min. 109 Santillana