EL DÍA DE LA MARMOTA

Las destituciones, el mal endémico del Real Madrid

Pues sí que hemos empezado bien este 2016... Es evidente que la situación por la que atraviesa actualmente el Real Madrid me suena mucho. Sí. Una vez más el Real Madrid se ha cargado a su entrenador. Esto ya lo he vivido yo más veces. Como digo en el encabezamiento del blog, aquí en 'Historias del Real Madrid' vuelco mis recuerdos como madridista durante las últimas tres décadas. Bueno, ya empiezan a ser algunos años más. Y, durante todo este tiempo, tengo la sensación de que esta historia ya la he visto demasiadas veces. Definitivamente, esto es 'El día de la Marmota' en versión futbolística.

El Real Madrid vuelve a tirar por el camino más corto. El de cargarse al entrenador. Una vez más. ¿Cuántos llevamos desde aquel fatídico cese de Radomir Antic por parte de Ramón Mendoza en el año 1992? Creo que el Club camina con rumbo errático, dando tumbos. No hay criterios futbolísticos y se actúa por impulsos. A lo que manda la prensa, como siempre. O los jugadores, que es peor.

Es evidente que el equipo no marchaba bien. Pero es que estamos en enero, joder, estamos en enero... ¿Ya está? ¿Ya no sirve el entrenador que se había fichado hace siete meses? ¿Siete meses son suficientes para echar abajo un nuevo proyecto? Porque no nos olvidemos de que este era un nuevo proyecto. Otro más. ¿Realmente se fichó a Rafa Benítez para iniciar una nueva etapa o se le había fichado... porque era el primero que se podía fichar?

No veo ni paciencia, ni criterio, ni nada de nada. Tengo la sensación de que Rafa Benítez estaba sentenciado casi desde que se puso el chándal del Madrid por primer día. Algunos jugadores no estaban contentos con él. Y muchos periodistas tampoco. Los mismos que han estado dando leña al técnico estos últimos meses en los medios son los mismos que después critican la falta de continuidad en los proyectos deportivos del Club. Y seguro que más de uno ahora dirá que Benítez no tenía que haber sido cesado y que se le debía haber mantenido en el puesto. Se haga lo que se haga, siempre mal. Siempre mal. Hipocresía. Mucha hipocresía es lo que veo, leo y escucho.

Muchos jugadores, desde luego, han quedado retratados como unos niñatos con todo este asunto. Supongo que ahora que se ha cesado al entrenador estarán satisfechos. Y eso que ellos, en última instancia, son los máximos responsables de lo que sucede en los terrenos de juego. Ellos son los que tienen que meter los goles. El entrenador dirige los entrenamientos y dirige a los jugadores desde la banda, pero son los futbolistas los que tienen que correr, sudar la camiseta y ganar los partidos. Se les paga muy bien por ello. Pero, francamente, creo que muchos de ellos no rinden por el dineral que cobran. No merecen tanto dinero. 

De los máximos dirigentes del Club, ¿qué se puede decir? Ellos tampoco quedan en buen lugar. Especialmente el presidente. No sé si Florentino Pérez se da cuenta de que su palabra vale cada vez menos, si es que tiene algún valor ya. No hace ni dos o tres semanas estaba ratificando y respaldando al entrenador públicamente para después... ¿cargárselo? Para eso, es mejor no abrir la boca. 

Por cierto, me dolió mucho el acto en el que se comunicó el cese de Benítez. La rapidez con la que se le despachó me pareció muy poco elegante. Muy, muy poco elegante... En 23 segundos se le pusieron las puntas a la tapa del ataúd y se pasó a presentar al nuevo entrenador como si no hubiera pasado nada... ¡Pero es que sí que ha pasado algo! Se ha echado al entrenador, a otro entrenador más, a mitad de camino.

Me hubiese gustado ver a Rafa Benítez despidiéndose en una rueda de prensa. Podrá gustar más o menos como entrenador. Pero, joder, que este entrenador es madrileño y madridista. Madridista de verdad. Uno que se lo ha 'currado' empezando a trabajar desde lo más bajo y en nuestra propia casa. Las lágrimas del día de su presentación eran de verdad, no eran una pose como las de esos jugadores que juran que son madridistas desde pequeñitos pero que, a la hora de la verdad, hubieran fichado por cualquier equipo que les hubiese puesto más dinero sobre la mesa. Rafa Benítez no es uno de esos casos.

Rafa Benítez es tan madridista que hasta en su adiós ha sido un señor. "Gracias por todo, ha sido un honor", titulaba el técnico en su carta de despedida. Una misiva cargada de buenas palabras hacia el Club que le ha dado una patada en el culo sólo siete meses después de haber empezado a trabajar. Seguro que otro, en la misma situación, se hubiese marchado echando sapos y culebras. Y yo lo hubiese entendido.

No sé si Rafa Benítez era el hombre adecuado para el puesto. De verdad que no lo sé. Pero, lo que sí que tengo claro es que si se apostó por él en verano, pues se apostó por él. Y si se apostó por él, se apuesta por él hasta final de temporada como mínimo. ¡Como mínimo! 

Sí. Es cierto que el equipo no estaba bien. Ni el juego ni los resultados estaban siendo los esperados... Pero es que yo ya hace mucho tiempo que he dejado de creer que en el fútbol las cosas se solucionan de la noche a la mañana, cambiando, quitando y poniendo a un entrenador por otro cada vez que las cosas se tuercen un poco. Eso lo deberíamos de saber bien en el Madrid después de haber disparado ya tantas veces el revolver en la ruleta rusa de los entrenadores. Lo dicho, 'El día de la Marmota'.

En su primera temporada con el Valencia, recuerdo que a Rafa Benítez se le criticó mucho durante sus inicios. Pero aquella misma temporada 2001-02 terminó ganando la Liga. Y luego llegaron más títulos para el cuadro Che. Estamos hablando de un entrenador que ha ganado títulos en casi todos los clubes en los que ha estado durante los últimos tres lustros. Quizás con más paciencia y dejándole trabajar hubiera hecho lo mismo aquí en el Madrid... ¿Quién sabe?

No me gusta nada que no termine contrato un entrenador. Pero aún me gusta menos que se cese a un entrenador a mitad de temporada. Rafa Benítez se incorpora a la extensa lista de entrenadores cesados en el último cuarto de siglo. Hace sólo unos meses, con motivo de la destitución de Carlo Ancelotti ya dejé aquí bien claro lo que opino de los ceses de entrenadores. Y como ya recogí en su día aquí en el blog, raramente un cese de entrenador a mitad de temporada ha servido para algo.

TEMPORADA 1990-91

John Benjamin Toshack

Le sustituye: Alfredo Di Stefano.

Alfredo Di Stefano

Le sustituye: Radomir Antic.

TEMPORADA 1991-92

Radomir Antic

Le sustituye: Leo Beenhakker.

TEMPORADA 1993-94

Benito Floro

Le sustituye: Vicente Del Bosque.

TEMPORADA 1995-96

Jorge Valdano

Le sustituye: Arsenio Iglesias.

TEMPORADA 1998-99

Guus Hiddink

Le sustituye: John Benjamin Toshack.

TEMPORADA 1999-00

John Benjamin Toshack

Le sustituye: Vicente Del Bosque.

TEMPORADA 2004-05

José Antonio Camacho - (Presentó su dimisión)

Le sustituye: Mariano García Remón.

Mariano García Remón

 Le sustituye: Vanderlei Luxemburgo.

TEMPORADA 2005-06

Vanderlei Luxemburgo

Le sustituye: Juan Ramón López Caro.

TEMPORADA 2008-09

Bernd Schuster

Le sustituye: Juande Ramos.

TEMPORADA 2015-16

Rafa Benítez

Le sustituye: Zinedine Zidane.

Es tal la decepción que siento en estos momentos y la desilusión que me transmite ahora mismo el equipo que, francamente, dan ganas de mandarlo todo a freír puñetas y buscarse una nueva afición. Hay muchos libros por leer, muchas películas y series de televisión por ver, muchos paseos que dar... A estas alturas de la vida, uno empieza a cuestionarse si merece la pena seguir pendiente de lo que hagan unos niñatos privilegiados con un balón. ¿Realmente tiene sentido seguir manteniendo la ilusión por el fútbol que tenía cuando era un niño?

En cualquier caso, sé que al final esto es como una droga y que este fin de semana estaré pendiente de lo que haga el Real Madrid. Como ha venido pasando semana a semana durante los últimos treinta años... Así que, a pesar de todo, muchísima suerte a Zinedine Zidane. La va a necesitar dado el ganado que se va a encontrar ahí dentro.