CELEBRANDO LA DUODÉCIMA

Increíble festejo en el Santiago Bernabéu para culminar una jornada de alegría, fiesta y madridismo

El Real Madrid decidió aparcar los festejos y celebraciones para el domingo. Pero minutos después de que Felix Brych pitara el final del encuentro los madridistas de todo el mundo ya estaban celebrando la consecución de La Duodécima. 

En Madrid la Fuente de Cibeles fue, una vez más, punto neurálgico de las celebraciones para miles y miles de aficionados que se fueron acercando al lugar habitual de celebración de los éxitos del Real Madrid. Este año, sin embargo, desde Cardiff el Club anunciaba que la plantilla no se desplazaría a la fuente de forma directa y que lo haría el domingo. Se evitaba, con buen criterio, la larga espera del año pasado, cuando jugadores y cuerpo técnico se presentaron en Cibeles directos desde Milán... ¡casi a las 7.00 horas de la mañana! Aún así, claro está, la fiesta de los aficionados se prolongó durante buena parte de la madrugada. No era para menos... ¡Campeones de Europa!

Con las instituciones

Las celebraciones oficiales arrancaron con la visita a la sede de la Comunidad de Madrid, donde la presidenta Cristina Cifuentes recibió a plantilla, cuerpo técnico y máximo mandatario blanco. Florentino Pérez obsequió a Cifuentes con una réplica de la Champions League. "Solo dos semanas después de la Liga volvéis a la casa de todos los madrileños. Esta Duodécima convierte al equipo en un equipo lleno de triunfos. Gracias por todo y por tanto. Ya eráis el mejor equipo del mundo y hoy lo sois todavía más", declaró la presidenta, que una vez más no tuvo reparos en colocarse la camiseta blanca con su nombre. "Prometimos volver y lo hemos hecho", señaló el capitán Sergio Ramos. 

Tras la Comunidad de Madrid llegó el turno del Ayuntamiento. Manuela Carmena, también tuvo palabras de elogio y agradecimiento hacia los Campeones de Europa. La anécdota llegó a la hora del intercambio de obsequios. La alcaldesa repitió premio y ofreció, tal y como sucedió durante la celebración de la Liga, las famosas medallas de chocolate. "Sinceramente pensamos que las famosas medallas de chocolate os han dado suerte, así que vuelve otra medalla de chocolate pero con otro sabor", advertía la alcaldesa mientras los jugadores celebraban alborozados y con brazos en alto el anuncio de las nuevas chocolatinas con alegría y muy buen humor. Hasta Cristiano profirió su ya famoso grito de guerra... Sin duda, todo un momentazo muy divertido. 

A Cibeles 

Tras pasar por las instituciones, los jugadores volvieron a montar en el autobús para aproximarse a la Fuente de Cibeles. A lo largo de la tarde ya se habían ido congregando, de nuevo, miles de personas que aguardaron a la llegada de los futbolistas. Al ser aún de día, el público era más familiar que en otras celebraciones, puesto que había también muchos niños. Cánticos y más cánticos adornaron la fiesta de los futbolistas, que exhibieron con orgullo el trofeo continental por la pasarela instalada alrededor de la fuente. Tal y como sucedió en la celebración de la Liga, los capitanes Sergio Ramos y Marcelo fueron los encargados de decorar a la diosa. El camero le colocó una bandera del Real Madrid alrededor del cuello y el lateral brasileño ajustó a la perfección una bufanda del equipo a la corona de la diosa, que también recibió un par de besos, cómo no...

De Cibeles partió la plantilla rumbo al Estadio Santiago Bernabéu, último capítulo de los actos programados. Hay que destacar que durante todo el recorrido, durante toda la tarde, el autobús de los madridistas se encontró  con miles y miles de seguidores que aguardaban el paso de los campeones para fotografiarles y saludarles. Por todas las calles había gente aguardando al equipo. Madridismo radiante y feliz por todos los lados...

Fin de fiesta 

Madridismo radiante y feliz también en el Santiago Bernabéu. El Estadio, donde veinticuatro horas antes decenas de miles de seguidores presenciaron en directo la Final a través de pantallas gigantes, volvió a llenarse para presenciar la gran fiesta. 

Lo que se vivió anoche en el campo fue apoteósico. Con un esquema similar al del festejo del año pasado, un público entregado contempló en las pantallas los años y ciudades en las que el Real Madrid ha ido cosechando sus éxitos en la Copa de Europa. París 1956, Madrid 1957, Bruselas 1958, Stuttgart 1959, Glasgow 1960, Bruselas 1966, Ámsterdam 1998, París 2000, Glasgow 2002, Lisboa 2014, Milán 2016 y Cardiff 2017. 

En medio de un espectacular montaje de imágenes y sonido, el presentador del acto, Miki Nadal, fue reclamando la presencia de los componentes de toda la plantilla del Real Madrid. Los primeros en aparecer, cómo no, el entrenador Zinedine Zidane y el resto de los componentes de su cuerpo técnico. Después, uno a uno, los futbolistas. No pudo estar presente Fabio Coentrao, aunque el portugués también fue mencionado y recordado. El resto, allí estuvieron. Yáñez, Danilo, Isco, Morata, Marco Asensio, Modric, Mariano, Lucas Vázquez, Kovacic, Casemiro, Casilla, Bale, James, Benzema, Kroos, Nacho, Varane, Pepe, Carvajal, Keylor Navas, Cristiano Ronaldo, Marcelo y Sergio Ramos. Los dos últimos, los capitanes, aparecieron con los dos trofeos recién conquistados, la Liga y la Champions League, cómo no. Allí todos bailaron al son del ya famoso "cómo no te voy a querer".

Esta vez no hablaron todos con el micrófono. "Señores, este año no vamos a hablar todos porque no queremos que lleguéis tarde a cenar", advirtió Sergio Ramos. El capitán, no obstante, ya se había dirigido al público para agradecer su inestimable apoyo durante toda la temporada. "Hemos hecho un doblete maravilloso. Valoradlo, que hace mucho tiempo que no lo vemos", exclamó el gran capitán, que también se expresó con mucho sentimiento: "Es un orgullo, de corazón, después de tantos años, decir que me sigo emocionando cada vez que piso este estadio, este campo. Muchas gracias por emocionarnos, por hacernos creer. Y un orgullo llevar el brazalete del mejor equipo del mundo. ¡Hala Madrid!".

También habló Zinedine Zidane al público, al que le comunicó que los jugadores habían hecho "un año espectacular" gracias a su apoyo. "Habéis creído desde el principio en nosotros y al final conseguimos el doblete y muchos más títulos", puntualizó el técnico justo antes de ser manteado por los futbolistas. Después, Cristiano Ronaldo y su grito, una vez más, para delirio de un público que pidió el Balón de Oro para el portugués.

Para finalizar, más fotos de la plantilla con la 'orejona', el vídeo con el Himno de La Décima y los fuegos artificiales. Y la vuelta de honor con los trofeos conseguidos, la Liga 33 y La Duodécima. El delirio para coronar una jornada muy especial de alegría y felicidad. La jornada posterior a la consecución de una nueva Champions League...

Y, al igual que el año pasado, quiero hacer una mención especial a los profesionales y técnicos de Real Madrid Televisión. Digno de elogio su trabajo y su cobertura, al detalle, de un fin de semana que ya es Historia del Real Madrid. Desde las previas del encuentro de la Final a la retransmisión de todos los festejos posteriores. Enhorabuena. ¡Y Hala Madrid!